Algún día tendré una casa colgante para columpiarme del baño a la cocina y de la cocina al comedor; una casa donde los cuadros bailen, las tazas se besen unas con otras en una orgía de tilines y la puerta sea un círculo que requiera un mortal "delfínico" con carrerilla previa.
En mi camarote sin olas a merced del viento no harán falta mecedoras, pero sí amigos con los que compartir la marea.
17 comentarios:
el euribor es el demonio
ah! y volvemos a tener bus
Pues espero que no suba a 666... :)
¡Bonobuses ya!
¡pues si es así yo me apunto a tu hipoteca! :)
¡Tanta palabra y tanta foto para justificar una orgía! (aunque sea de tilines)...
Tendríamos que buscar una rama cercana, Ari, que ahora estamos muy lejos. ;)
Mecacholo: soy una perdida... :)
Y con florcitas de colores para poner en el balcon.
¿Lo de hipo-teca es una alusión al post anterior?
Con el vaivén, dormirás todo el día. Tu casa colgante cura el insomnio.
Me encantaría pasarme algún día con su permiso, soy muy buena aguantando mareas, y le llevaría un bizcocho recien hecho y algo de música a base de cristalitos móbiles, y unas mantas para todos, por si hace frio... :)
Besitos pajarillo!
qué bonitas palabras
Quedamos para salpicarnos con el té.
¿Me invitarás a tu casa colgante? Mi cuerpo no está para orgías de tilines, pero al menos, rara vez me mareo...
¿me puedo pasar yo también? llevo el té y todavía sé columpiarme!
Aunque me supondriera tropecientos batacazos llegar a conseguir el mortal delfínico para acceder a la puerta de tu hogar... allí me tendrías algo magullada pero feliz
¡Estáis todos invitados! ¡Faltaría más!
Publicar un comentario