16 comentarios:

Nata Hernández dijo...

Es una pena que odie a la gente, porque me están entrando ganas hasta de manifestarme...

Nata Hernández dijo...

Las leyes con que juzgas, ¡oh Batino!, 

menos bien las estudias que las vendes; 

lo que te compran solamente entiendes; 

más que Jasón te agrada el Vellocino.

El humano derecho y el divino, 

cuando los interpretas, los ofendes, 

y al compás que la encoges o la extiendes, 

tu mano para el fallo se previno.

No sabes escuchar ruegos baratos, 

y sólo quien te da te quita dudas; 

no te gobiernan textos, sino tratos.

Pues que de intento y de interés no mudas, 

o lávate las manos con Pilatos, 

o, con la bolsa, ahórcate con Judas.

Francisco de Quevedo

ariadna dijo...

¿nos inventamos un planeta y nos fugamos, Nata?

Nata Hernández dijo...

¡Meriendoburgo será la capital!

Anónimo dijo...

¡Pues yo no! ¡Y soy totalmente de izquierdas! ¡Ese "señor" ha hecho tanto daño, en su locura ególatra, que no tiene vida suficiente para pagar todo el daño que ha hecho!

Nata Hernández dijo...

Pues fenómeno. ¿Desea alguna cosita más?

Mecacholo dijo...

¡¡No me puedo creer a una Nata reivindicativa!! Ojos para ver...

Mecacholo dijo...

Nótense los colores utilizados en el diseño: rojo y negro. ¿"Incipiencias" de un sentir anarquista en nuestra bloguera preferida? :)

Nata Hernández dijo...

Y si no puedes hacer tu vida como la quieres,
en esto esfuérzate al menos
cuanto puedas: no la envilezcas
en el contacto excesivo con la gente,
en demasiados trajines y conversaciones.
No la envilezcas llevándola,
trayéndola a menudo y exponiéndola
a la torpeza cotidiana
de las compañías y las relaciones,
hasta que llegue a ser pesada como una extraña.

Kavafis

Nata Hernández dijo...

Los colores son un homenaje a las Juanolas.

Bernardo Gui dijo...

Su sorpresa denota que conoce usted poco a esta mujer.

Nata Hernández dijo...

No la conozco ni yo...

Mecacholo dijo...

Venerado Bernardo: yo no conozco mujer.

Nata Hernández dijo...

Diga usted que no, pater, que yo le he visto por ahí con una rubia de muy buen ver. Al octavo mandamiento le están pitando los oìdos.

Anónimo dijo...

Como se puede defender a semejante persona desde este espacio tan culto, como se puede caer tan bajo. Y soy de izquierda tambien.

Nata Hernández dijo...

¿No tiene tildes su teclado?